Los casos de violencia familiar van en aumento en el distrito de Salas, indicó el dirigente de las rondas campesinas, José Carrillo de la Cruz.

 

Ahora el problema no solo es el abigeato al que están acostumbrados a controlar sino que la violencia hacia la mujer está aumentando, explicó y pidió la intervención de las autoridades regionales para trabajar en la zona.

 

“Por el momento estamos saliendo a los caseríos para dar seguridad porque la policía solo da seguridad en el mismo centro, pero nosotros vamos más allá”, comentó.

 

Sin embargo, la falta de herramientas y uniformes muchas veces imposibilita cumplir con su trabajo. Señaló que les faltan chalecos, linternas y lo más importante las pencas con las que amenazan a quienes tengan un comportamiento agresivo.

 

En la parte baja del distrito se cuenta con tres rondas, pero en la parte alta como lo es Colaya, Penachí y La Ramada se han conformado más rondas.

 

“No recibimos ningún incentivo, nuestro trabajo es ad honorem, es por eso que muchos se desaniman y no disponen de tiempo para ayudar en la seguridad”, aseveró.

 

Por su parte, el alcalde distrital Antony Mesones Flores explicó que en la comisaría distrital hay 7 policías, en el centro poblado de Penachí 4 y Colaya 2 efectivos.

 

Se trabaja en coordinación con el centro de formulación de proyectos de la comandancia Macro Regional de PNP para la elaboración de tres perfiles técnicos que sirvan para el mejoramiento de las comisarías.