Un alto nivel de vulnerabilidad ante un sismo de fuerte intensidad presentan las viviendas en el distrito de Nueva Arica, así lo dio a conocer el subprefecto de la zona. Precisó que el anterior Niño Costero dejó serias secuelas en la débil infraestructura de las casas.

 

La autoridad política, Esteni Alcántara Terán, recuerda que el distrito de Nueva Arica fue seriamente afectado por el fenómeno El Niño Costero, donde varias viviendas sufrieron las consecuencias por la humedad, producto de las intensas lluvias e inundaciones, dejando debilitadas sus estructuras.

 

Y es que, según una evaluación efectuada en esta zona, se ha determinado que de las aproximadamente seis mil viviendas, el 90 por ciento de estas son rústicas, es decir, de adobe, lo que no representa ninguna garantía en caso de presentarse un sismo de regular magnitud.

 

Alcántara Terán recuerda que, si bien el 2017 las lluvias causaron estragos, fueron pocas las viviendas que colapsaron. “Lo que sí se afectó fueron los corrales que estas casas tienen en la parte posterior, muchas se cayeron”.

 

Lo que sí tiene claro la autoridad política, es que en caso de un sismo de fuerte intensidad un 50% de viviendas podrían caer, debido al debilitado estado de sus bases y a lo precario de las construcciones.