Cada día aumenta el rechazo a ciudadanos extranjeros que habitan en la región Lambayeque, debido a los casos delictivos en los que están involucrados.

“Como sociedad es necesario que distingamos los delitos de aquellos que son actos xenofóbicos, influenciados por el miedo y perjuicio que se tenga contra las población. No todos son malos, no hay porque generalizar”, aseveró.

Incluso mencionó que esta opinión desfavorable para los extranjeros está incentivando situaciones de violencia con conductas inapropiadas, tal es el caso de una niña de 6 años de edad que estudia en un colegio del distrito de José Leonardo Ortiz y fue agredida por sus compañeros de estudios.

“Recién ayer me informaron sobre este caso, la niña venezolana ya no quiere ir a su colegio y le pide a su madre regresar a su país. No queremos que aparezcan más casos de niños venezolanos agredidos por niños peruanos o viceversa, debido a este clima de violencia e incentivación de maltrato hacia el venezolano.

Díaz Callirgos, mencionó que siempre hubo robos y otros delitos en Perú, pero ahora se está magnificando con la llegada de venezolanos, aprovechando esta situación para desviar la atención. “Las autoridades están aprovechando esta situación para poner desviar la atención y es como si el tema venezolanos solo está en agenda”.

La representante de la Diócesis de Chiclayo pidió a las autoridades permitirles participar en estas reuniones para aportar y llegar a compromisos.

El abogado Yuri Díaz Jaime, manifestó que las autoridades deben actuar con apego a las normas y a la Constitución Política, así como los tratados internacionales para lograr el ordenamiento. “Hay un marco jurídico internacional que es estudiado por el Derecho Internacional Público, en el que indica que hay que respetar los acuerdos internacionales, de no hacerlo implica que se estén adoptando posiciones xenofóbicas, hay que tener cuidado porque no podemos restringir las normas de Derecho Internacional Público”.

Explicó que ahora lo difícil se hace porque permitieron el ingreso de al menos 900 mil extranjeros al Perú, sin un control adecuado. “Ahora viene la complicación, identificarlos cuesta tarea, se está poniendo en evidencia por la alta tasa de criminalidad en las últimas semanas cometidas por venezolanos, eso implica hacer un trabajo más riguroso”, dijo el abogado Yuri Díaz.

El letrado mencionó que lo correcto es que el venezolano sea juzgado en el fuero ordinario como cualquier otro ciudadano peruano y quienes tengan antecedentes sean expulsados del país.

Ahora el trabajo recae en la PNP y Migraciones quienes deben hacer el control e identificación de quienes ingresan a territorio nacional.