Los obreros de la Municipalidad Provincial de Chiclayo advierten el inicio de una huelga, debido a la desatención de la autoridad edil en cuanto a sus pliegos de reclamos, cuya medida pondría en peligro la salud pública.

 

De manera diaria, Chiclayo produce entre 320 a 340 toneladas de residuos sólidos, pero por deficiencias (falta de personal y maquinaria) se recoge hasta el 85%. De acatar una huelga, solo se cumpliría con el recojo de basura en hospitales, clínicas, colegios y mercados.

 

Es decir, la población se expondría a varias enfermedades por la contaminación ambiental generada por los desechos.

 

El médico infectólogo y dermatólogo del hospital Las Mercedes, Gerardo Jiménez Luna, manifestó que la acumulación de desechos orgánicos hace que proliferen bacterias, parásitos y vectores como moscas zancudos en el ambiente. Muchas de estas bacterias y virus se pueden aspirar, entrando en contacto con la piel.

 

Otro mecanismo de contaminación es que, los vectores (moscas y zancudos) pueden llevar las bacterias de un lado a otro y contaminar los alimentos que consume la persona, causando fiebre, tifoidea, problemas diarreicos agudos y otras enfermedades.

 

“Al haber mayor cantidad de bacterias en el ambiente es más probable que la gente ingiera bacterias o entre en contacto con ellas, causando enfermedades diarreicas, respiratorias y cutáneas”, explicó.

De manera general dijo que todos están expuestos, pero son los niños quienes tienen menos cuidados en cuanto a higiene.

 

La bioseguridad de los obreros es otro tema preocupante, puesto que al no contar con sus herramientas de protección están trabajando con el peligro de enfermar.

 

El secretario general del Sindicato de Obreros de la Municipalidad Provincial de Chiclayo(MPCh), Bibiano Carrasco Llaja señaló que se cuenta con una población obrera de 1136 y que según leyes, el municipio está obligado a entregar dos uniformes en verano y dos en invierno, así como tapa bocas, guantes, mandiles, zapatos, entre otros implementos importantes para su protección.

 

También reclaman por la situación en que están los servicios higiénicos, donde a veces hay agua o a veces se olvidan de la limpieza. “Los obreros terminan su faena y quieren asearse, pero no tienen como, porque los baños de la maestranza o de Serenazgo están en pésimas condiciones y así deben regresar a sus casas”.

 

El especialista en infectología y dermatología expuso que el obrero al trabajar directamente con la basura, la exposición a enfermedades se agrava. “Ellos deben estar al máximo en bioseguridad, no debe quedar al descubierto ninguna parte de su cuerpo, porque los desechos de todo tipo están ahí, respirando y en contacto”.

 

También mencionó que es indispensable que la municipalidad eduque a la población sobre la selección de los residuos sólidos. Una bolsa para plásticos, otra para vidrios, y así sucesivamente.

 

“Hay que educar a la gente para que sepa segmentar su basura, así como los recicladores, los obreros están directamente expuestos, ahora los vecinos juntan jeringas como desechos orgánicos y otros, exponiendo a todos a enfermedades”, comentó.

 

El dirigente responsabilizó a Marcos Gasco Arrobas por la contaminación ambiental que afecte a la población, pero también porque los obreros están enfermando. Desconoció el número exacto de obreros enfermos, pero dijo que sí los hay.

 

Ayer la masa trabajadora realizó una protesta, para pedir a la autoridad el diálogo para tratar el pliego de reclamos 2020. Además para tratar sobre la supuesta privatización que anuncia el alcalde de iniciar la huelga los trabajadores.

 

“Este alcalde es un irresponsable, porque al privatizar el servicio, subirá los arbitrios, esto no va a perjudicar al obrero sino a la población. Me sorprende que el primer vecino de Chiclayo trate así a los trabajadores, el culpable es él. El obrero contribuye en la mejora de la recaudación, de donde sale hasta para pagar el sueldo del alcalde”, acotó.

 

Agregó que actualmente son entre 15 a 17 máquinas, entre compactadoras y volquetes, cuando el número podría ser más, si la autoridad invirtiera en el mantenimiento.